
En mi segunda visita y como siempre acompañada de una larga espera, la doctora (muy amable) tuvo el detalle de hacerme una radiografía, imagino que sería para descartar una “meningitis”, por ejemplo. Llegó por fin mi turno y cuando entré a su consulta me dijo textualmente; "Tienes la espalda hecha polvo para tu edad".
No me sorprendió su comentario, era algo que yo ya sabia, pero más que saber, lo sentía por los fuertes dolores que he ido arrastrando hace años. Me comentó que se podía tratar de una Artrosis y me hablo de un pinzamiento. Yo no soy médico y tampoco entiendo de radiografías, pero cuando miré la mía, sabía que mi cuello estaba para el “reciclaje”.
A casa me fui con una Cervicalgia, estuve unos cuantos días más con ese fuerte dolor, me remitieron el alta a mi médico de cabecera. Poco después, cuando ya podía moverme, fui a mi Centro de Salud, le comenté a mi doctor lo que me había ocurrido, pero él no estaba muy por la labor de mirar mi informe y estaba haciendo su juicio paralelo. Le pedí que por favor se dignara a mirar mi radiografía, cuando lo hizo, confirmó lo que la doctora me había dicho. Aún así, seguía algo reacio para mandarme a un especialista, pero lo conseguí.
Por cierto, pedí en Enero la cita y me lo han dado para Mayo. Ahora espero lo que me diga el reumatólogo.
Ahora procuro no forzar mucho mi cuello, siento como me cruje, y esos chasquidos al andar, el pitido en el oído, esos mareos repentinos, en fin, que os voy a contar que no sepáis.
¡Ah! La de arriba es mi radiografía। No hay que ser muy experto para darse cuenta que no tiene muy buena pinta. ¿Qué opináis?